Excursión a Delfos, Arachova y Monasterio de San Lucas desde Atenas

Tras recogerle en su hotel de Atenas, disfrute de un viaje panorámico por los pintorescos valles y campos de algodón de Tebas, mientras su guía experto comparte historias de los antiguos griegos. La primera parada breve de su viaje en autobús con aire acondicionado es Livadiá, una ciudad famosa por su comercio de bonitas alfombras de colores.

A mediodía, contemple con asombro cómo el autobús llega a los pies del Monte Parnaso, donde se encuentra el santuario de Delfos. El santuario, conocido como el Templo de Apolo, sirvió como sitio para la adoración del dios Apolo después de que se pensara que había matado a un dragón que vivía allí.

Mientras pasea con su guía por este yacimiento arqueológico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, pasará por Castalia Spring y verá sus famosos monumentos, como el Tesoro de los Atenienses, el teatro y la Sacred Way que, en la antigüedad, fue rodeada por tesoros y estatuas que ofrecieron las ciudades estado para honrar a Apolo y demostrar su importancia y su fortuna.

A continuación se dirigirá al interior del Museo Arqueológico de Delfos con su guía. Este tesoro consta de 15 salas que albergan innumerables objetos y asombrosas exposiciones que incluyen el friso del Tesoro de los Siphnians, la esfinge de Naxos, la estatua de Antinous y la famosa Auriga de Delfos de bronce.

Después de explorar el museo, regresará al autobús y continuará hasta el pintoresco pueblo de montaña de Arachova. Conocida por sus tapetes, mantas y alfombras tejidos a mano, Arachova también es famosa por su delicioso vino y su queso. Disfrute de su tiempo a su propio ritmo parando, por ejemplo, para tomar una refrescante bebida en una cafetería o probando algunas de las deliciosas exquisiteces locales en uno de los restaurantes (no incluido en el precio).

Reúnase con su guía y refrésquese en el autobús con aire acondicionado mientras viaja hasta el Monasterio de San Lucas, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Construido en el siglo XI durante la época bizantina, el Monasterio de San Lucas alberga una serie de complejos mosaicos que adornan su catedral, lo que la convierte en uno de los mejores monumentos de la arquitectura bizantina de todo el país.

El recorrido termina a primera hora de la tarde al llegar de nuevo a su hotel de Atenas después de un relajante paseo en autobús.