Excursión de un día a Belén y Jericó desde Tel Aviv

Deje el céntrico hotel de Tel Aviv en un autobús con aire acondicionado y viaje por el desierto de Judea a Jericó. En la ruta verá el la pensión del Buen Samaritano, el sitio asociado con la querido parábola bíblica.
Deténgase un momento en el cartel que marca el nivel del mar y contemple las vistas del valle del Jordán, el lugar donde se cree que Jesús fue bautizado; y el oasis de Jericó mientras desciende a la ciudad poblada continuamente más antigua del mundo. Mencionadas en el Antiguo y Nuevo Testamento, los muros de Jericó fueron, según la biblia, derribados por los sonidos de la trompeta del ejército israelita de Josué. En esta antigua ciudad también se cree que Jesús volvió tras su tiempo en el desierto.
Observe Monte de la Tentación, la montaña que se eleva sobre la ciudad, y vea el montículo Tel y el manantial de Eliseo, este último mencionado en la biblia. Su guía le mostrará también la higuera en la que la Biblia narra se subió el publicano Zaqueo para tener una mejor vista de Cristo.
Haga un descanso para el almuerzo (no incluido en el precio) en Jericó o en su visita a Belén, en función de los horarios.
Habiendo visto Jericó, relájese mientras se dirige a Belén, lugar en el que se cree que nació Jesús. Cuando llegue, pasee por la Plaza del Pesebre y entre a la iglesia de la Natividad. Descienda a la Gruta de la Natividad, donde una estrella marca el lugar en el que nació Jesús. Continúe hasta la Iglesia de Santa Catalina donde San Jerónimo tradujo la biblia del hebreo al latín.
Por último, podrá ver el campo de los pastores, donde una iglesia conmemora el lugar donde pastores fueron informados del nacimiento de Jesús. Después, regresará a Tel Aviv, donde finaliza la excursión con un traslado de regreso al hotel.